Cuando a la gente le dicen Chillán piensa en longanizas, yo pienso en la Tía Lupe y sus platos gigantes y ricos por pocas lucas."Lugar: Tía Lupe
Dirección: Arturo Prat #560, Chillán, Región del Ñuble
Horario: 8:00 Hrs - 17:30 Hrs
Evaluación: 4 balazos al aire
Evaluación: 4 balazos al aire
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| La maravilla.- Papas mayo con carne a la olla |
Viajar de Concepción a Chillán es un panorama al que nunca me niego aunque sea por trabajo. Cuando a la gente le dicen Chillán piensa en longanizas o en el mote con huesillo, yo en cambio pienso en la Tía Lupe y sus platos gigantes y ricos por pocas lucas.
Por recomendación de un colega de esa ciudad, llegamos hasta la Tía Lupe, un local que en la entrada tiene la lista de recomendaciones para el almuerzo en una pizarra de tiza, típico de picada.
A las 8 am, el local abre para servir los desayuno "como en casa", con nada espectacular pero conservando los bajos precios. A eso de las 12 am comienzan con el almuerzo, platos caseros y con harto cariño.
La primera vez que visité la Tía Lupe, pedí un plato que a penas pude terminar y que me hizo bastante feliz por su calidad vs precio. La decoración es como "el muro de morande", con flores de plástico, paredes de madera, algunas mesas con manteles y otras sin nada. Una decoración que deja mucho que desear. Pero esta segunda vez, no lo dudamos y volvimos a ojos cerrados.
Esta vez estaba lleno y nos costó encontrar mesas, a pesar de que el local cuenta con hartas mesas y espacio para los comensales. Nos ubicamos en una mesa que se desocupó aún sin limpiar, aunque se entiende, ya que las garzonas andaban corriendo de lado a lado por lo lleno del comedor.
Cuando llegó nuestro turno pedí las típicas papas mayo con carne a la olla, la que venía con una salsa con verduras exquisita. Ese plato venía acompañado de ensalada, pan, pebre y bebida por $3.500.
La atención es rápida, el plato es barato y la calidad es buena. Aunque no es un lugar para ir con una cita esperando un almuerzo romántico o un lugar de alto estatus.
Sin duda un lugar tres B, el imperdible y recomendado de Chillán.
